lunes, 15 de junio de 2015

NO HAGÁIS FRENTE AL MALVADO

Podría parecer que al decir esto, no pongáis resistencia al que te hace mal,  uno renuncia a sus justos derechos de defensa para doblegarse. Que con ello Jesús promueva la sumisión, el aguántate. Sin embargo su postura es una su verdadera revolución. La del que lejos de entrar en la órbita de la violencia, muestra en sí  y al otro la superación de la maldad. Es la victoria del que prefiere que repercuta en él, el mal del otro, y así amortiguarlo. El evangelio nos invita a la vida nueva y esto tiene consecuencias en la propia vida, a veces dolorosas. El evangelio no es matemáticas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario