Quiero ocuparme de los inicios de los libros bíblicos y con todos los textos que están relacionados con comienzos, con vueltas a comenzar, vocaciones, conversiones, manifestaciones y primeras acciones y palabras. Se trata de saborear la tierra donde germina el hombre, donde florece Dios.
COMIENZO DEL EVANGELIO
El evangelio es una constante invitación a releer, a rehacer el camino. Es un aprendizaje como el piloto de formula 1, por ejemplo, que memoriza el circuito por donde va a circular. Esa memorización no le exime de prestar atención. Releer es el camino para el verdadero conocimiento del Reino, y en nuestro caso de Jesucristo. A nosotros se nos invita a ponernos en la postura del que está empezando porque solo así no nos cansaremos del camino emprendido. Al contrario estaremos descubriendo, redescubriendo.
ANTES
Antes que te formara en el vientre te reconocí y antes que salieras
del seno te consagré, como profeta para las naciones te puse. Este texto de la vocación de Jeremías nos habla del Dios que nos antecede, de su llamada que es un susurro suave y poderoso a vivir; su llamada es vida, no una carga insoportable o desgracia sino la verdadera gracia de la vida. La vida es una llamada de Dios que va creciendo en nosotros a medida que nosotros lo vamos descubriendo. Su elección no está en función de nuestra bondad. Su elección es la gracia por excelencia.
CREAR
Creó 'Elohim los cielos y la tierra. Dios es más grande que los cielos y la tierra. El los hace surgir, No se trata de materialidad. Se trata que Dios supera todo, la globalidad de lo real. Los cielos y la tierra nos circundan. Dios nos abre, no nos encierra sino que nos llama a El y nos hace superar la materialidad de lo real para alcanzar la realidad plena.
JESUCRISTO ORIGEN DIVINO HUMANO
¿A quien iremos? Tu tienes palabras de vida eterna. Nuestro comienzo es Jesucristo. La fuente en la que bebemos el agua viva de Dios. El pan bajado del cielo para sostenernos en nuestra peregrinación. El es la nueva creación, la nueva humanidad en la que nos insertamos por el Bautismo. En el agua primigenia nos sumergimos en el misterio de vida y comunicación de Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo y por el Espíritu comenzamos nuestra andadura como hijos en el Hijo.
EL LOGOS
Ya existía al principio. Se podría decir que todo tiene su principio en Él. La Palabra estaba volcada hacia Dios, cabe Dios, era Dios. Y tomó nuestra naturaleza mortal, se hizo carne. Acampó en nosotros y acampa si no cerramos la puerta a la luz de Dios. Revivamos en la Palabra y destruyamos las lanzas. Sembremos la Palabra en la tierra y convirtámosla en un campo de trigo que el viento mece.
